Banilejos se paran firmes en defensa de las Dunas
Baní.-Pese a que Medio Ambiente negó ayer la denuncia, personalidades banilejas y sectores ambientalistas, sociales, económicos y turísticos y del ámbito oficial manifestaron su rechazo “rotundo” a un permiso emitido aquí por Medio Ambiente y el Ayuntamiento, autorizando a particulares a parcelar y hacer desmonte de la capa boscosa de las Dunas.
Listín Diario publicó, en su edición de ayer, viernes, la preocupación que ha causado aquí y en otros sectores del país la noticia de haberse conocido de un permiso otorgado por Medio Ambiente y la Alcaldía local a favor de dos personas, para retirar vegetación y matorrales en un área de 3, 185 metros en la zona de amortiguamiento de Las Dunas.
La encargada de la dirección provincial de Medio Ambiente, Patricia Báez, dijo a medios locales haber otorgado permiso a Julio Alberto Guerrero Báez y a Flor María Cabreja Soto a construir y levantar empalizadas en un área de Las Dunas y para “limpieza de los terrenos”, que estos ocupan con título de propiedad.
Eleuterio Martínez, ingeniero forestal y especialista en Ecología Tropical y Gestión Ambiental, expresó sobre esta nueva agresión en contra de Las Dunas de Las Calderas, que estas son un monumento natural categoría 3, sobre el cual no se puede emitir ningún tipo de permiso que implique afectar este patrimonio con parcelamientos o desmonte de su casa vegetal ni extracción de sus arenas.
La gobernadora de Peravia, Yadira Báez, dijo que Las Dunas es un área protegida, por lo que “deploramos cualesquier acción que se efectúe para dañar este preciado tesoro de los banilejos”.
El ambientalista Alexis Agramonte dijo a Listín que este tipo de permisos constituye un abuso contra nuestras Dunas y las autoridades banilejas ni nacionales jamás deben permitir este tipo de atropello, “contra el más preciado recurso ecológico que tenemos”.
Para Manuel Guerrero, del grupo ambientalista Universo Verde, los daños ocasionados al medio ambiente en la provincia Peravia no solo ocurren en Las Dunas, sino también en la extracción de agregados del área costera del Mar Caribe y de los ríos Nizao y Bani, y los arroyos.
Fabio Fernando Herrera, miembro del patronato de protección al Cucurucho de Peravia, explicó que la situación de Las Dunas banilejas requiere mucha atención, ya que cada cierto tiempo un grupo de personas desaprensivas, tratan de aprovechar los descuidos, falta de vigilancia y permisibilidad de los responsables de velar por el mantenimiento de estas áreas, para sacar provecho personal, y explotar los recursos que conforman esta reserva sin importar los daños ecológicos que ocasiona esta explotación indiscriminada.
El Clúster Turístico y Productivo de Baní, que desde hace cuatro años ha planteado un plan de co-manejo sobre Las Dunas de Baní al Ministerio de Medio Ambiente, para que proteja este recurso natural, su presidente, Juan Tejeda, dijo oponerse a toda actividad que vaya en desmedro de ese activo natural único en el país y la Región del Caribe.
“En el caso de este nuevo intento de invasión de las dunas estaremos atentos para evitar que pueda realizarse, como ya hemos actuado en el pasado”, aseguró Tejeda.
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